Posts etiquetados ‘Elecciones autonómicas 2011’

Mientras los españoles estamos digiriendo el empacho de los cuatro clásicos entre el Real Madrid y el Barcelona. Mientras nos tiramos los trastos a la cabeza por la expulsión a Pepe, la teatralización de Alves, lo bueno que es Messi o las palabras de Mourinho. Mientras los políticos afilan sus armas para dar comienzo a la campaña electoral y sacar lo peor de ellos para arañar unos puñados de votos. Mientras nos agolpamos en vivir acomodadamente, el Tribunal Constitucional da una mala noticia, pero esperada. Bildu, es decir, ETA, llamemos a cada cosa por su nombre, es legalizada por los jueces de dicho tribunal nombrados por el PSOE.

Para muchos, esta noticia le puede resultar insignificante. Pero para las personas con corazón y unos valores asentados en la libertad, el respeto y la igualdad, la “justicia” nos da un fuerte revés. Y más de la forma que se están haciendo las cosas. Mayor Oreja ya lo avisaba hace tiempo y nadie le hacía caso, salvo insultarle y menospreciarle. Un servidor ya escribió hace unos meses en este mismo blog un artículo titulado “SORTU, el señuelo etarra” sobre la intención de la banda terrorista y una hipótesis de futuro que, por desgracia, se ha cumplido tal como pronostiqué.

ETA, la supuesta banda antifranquista, ha conseguido su objetivo. Se podrá presentar a las próximas elecciones autonómicas y municipales. Los pistoleros podrán respirar tranquilos con la ayuda de Zapatero y el dinero público, pagado incluso por sus víctimas, para financiarse sus futuras fechorías. Parte de la iglesia y de empresarios vascos, así como gran parte del PNV, se sentirán orgullosos al ver a ETA gobernar a sus presas cabizbajas y con el miedo, otra vez, metido en el cuerpo.

Este fin de semana Rubalcaba, el hombre que siempre miente porque desconoce la verdad, decía que le parecen “abyectas y antidemocráticas” las críticas del PP al TC. Más abyecto y antidemocrático es apoyar a una banda de asesinos para ganarse el apoyo del PNV en los Presupuestos Generales del año que viene. O la negociación que siguen manteniendo con ETA. A Zapatero, como al gobierno y sus secuaces, les da exactamente igual el dolor de un pueblo herido por la intolerancia de un grupo de sanguinarios. Solo le importa gobernar de la forma que lo está haciendo, el famoso “como sea”. Que tenemos que sacar una subida del IVA, pues contamos con el apoyo de los canarios, aunque ellos no tienen este impuesto. Que tenemos que buscar apoyo parlamentario para llevar a cabo alguna ocurrencia, pues damos dinero a Cataluña para contar con CIU y ERC. Que tenemos que sacar adelante los Presupuestos Generales, pues presionamos a nuestros jueces para permitir que ETA este en las instituciones para asegurarnos el apoyo del PNV. Porque al gobierno le da igual que un preso etarra salga de la cárcel y pida el voto para Bildu, como ocurrió ayer. Su único interés es mantenerse en lo más alto del gobierno, aunque tenga que pisotear la memoria de las víctimas o la dignidad de la ciudadanía española.

Ya no vale la excusa de que en España hay democracia y por eso debemos permitir la legalización de ETA. Este lema barato y simplón cuela una vez. Pero cuando se lleva escuchando la misma cantinela año tras año, como la intención de nuevos partidos abertzales de abandono de la violencia, resulta gracioso y a la vez repugnante que haya gente que se los crea. Ya no vale el arrepentimiento repentino del brazo político de los etarras y su buenismo vespertino. Como dice el rotulillo, “si me mientes una vez la culpa es tuya, pero si me engañas más veces la culpa es mía”. Esto es lo que está ocurriendo ahora mismo. Por eso la culpa es de la justicia que se deja otra vez engañar y camelar por ETA para recibir dinero público, y todo por favorecer los planes del gobierno y del presidente.

ETA, al igual que ocurre en este artículo que se repite una y otra vez, lo mismo pasa en la campaña electoral, menos en una persona, Mariano Rajoy. Zapatero, Felipe González, Pepiño Blanco, Aznar, Aguirre o Rita Barberá se han pronunciado sin tapujos sobre el tema, acribillándose dialécticamente al más estilo barriobajero y con el “tú más” sobre las políticas antiterroristas de ahora y de antaño. Pero Mariano Rajoy sigue sin gastar una milésima de segundo. En parte, está bien que no se deje enfangar y liar por los socialistas, ya que su estilo tranquilo, pausado y aburrido le puede dejar en un mal lugar. Pero no estaría mal que en los mítines, además de mostrar más alegría y pasión ante sus votantes, dijera en cuatro palabras su opinión sobre Bildu, es decir, que no debe  estar ETA en las instituciones, y luego que siga con sus propuestas económicas para frenar el gran lastre de este país, el paro.

Por último, como suelo hacer siempre cuando hablo de ETA, un recuerdo a las víctimas. No me quiero ni imaginar la sensación vivida el jueves en torno a la medianoche cuando se daba a conocer la noticia que todos esperábamos y nadie quería, salvo los interesados por defender el terrorismo. Menos mal que las víctimas están hechas de otra pasta, sin rencor, solo buscando la libertad y la justicia ante aquellos asesinos que un día les arrebataron a algún ser querido. Menos mal que las encuestas son negativas a Zapatero, y con suerte, en menos de un año no le veremos la cara todos los días como nuestro presidente, aunque su propósito de pasar a la historia lo ha conseguido, pero de forma distinta a como hubiera deseado. La lucha antiterrorista de este gobierno socialista se conocerá en los anales de la joven historia de la joven democracia española como “la traición de Zapatero”.